La serpentina es un grupo de silicatos hidratados que comprenden cuatro tipos principales (crisotilo, antigorita, lizardita y amesita). El aspecto de las diferentes variedades de serpentina es parecido. Dependiendo de cada variedad, puede ser rica en magnesio, en hierro, en aluminio, en manganeso, en níquel, en litio, en zinc o en calcio.